Después de tanto llorar y sufrir. De creer que eso sería así por siempre y de normalizar el dolor. Hoy soy feliz, tu me quiero y me quieren. Hoy tengo alguien al lado que no me hace daño, que en vez de provocar lágrimas provoca risas. Eso es lo normal. Basta de romantizar dolor en las relaciones amorosas.