Y no importa si ya nunca más vuelvo a verte,
a rozar tu trémola piel,
a sentirte parado a mi lado con tu aspecto desgarbado y frágil
Me consuela saber que aún existes
que el mundo se inunda de tu presencia y tu ser dispuesto en bondad
donde sea que estes, esa porción de tierra será iluminada de la bondad más cándida
y eso,
me llena de paz.
Hache, una vida sin vos.
Hache, un mundo con vos.