♡ ☮ ♪✿

Tanta fuerza y tanto amor hacen al mundo girar, algún día lo descubrirás . . .

13 de abril de 2020

Si el mundo se acaba...

Conci... ¿donde estarás? Hay pandemia mundial y me pregunto si estarás bien. Se que ella te cuida todo lo que yo no te cuide y eso me deja tranquila, pero me asusta el hecho de que se acabe el mundo sin haber tenido nuestra charla pendiente. Yo sé que nunca me volverás a hablar, ni siquiera es de tu agrado saludarme al pasar, y yo no quiero ir en contra de tu voluntad. La garganta se me anuda cada vez que te cruzo sin querer, cada que pienso en el fin, cada que algún recuerdo remoto e insconsciente me ataca por la espalda de forma despiadada contra mi voluntad. Charla pendiente repite mi cabeza. Jael, no pudiste cerrar la historia. ¿Cómo se empieza otra historia, otra vida, sin cerrar la anterior? Sin darle una conclusión moderadamente aceptable a todas las preguntas que rondan como demonios de tristeza en mi cabeza. Como no tengo opción lo escribo. Hache: yo te quise como jamás quise a nadie, y tristemente vos crees que nunca te quise. O que se yo, que mierda sé que crees vos. Jael, no podes ir por la vida creyendo saber lo que cree/siente todo el mundo.
Si el mundo se acaba... sé que no vendrías, tampoco yo lo quisiera, ahora hay alguien que ocupa ese lugar y me quiere como no me quisieron antes, o al menos con la constancia necesaria para que pueda perdurar.
¿Pero si el mundo se acaba sabrás que te quise como nunca he querido? ¿Sabrás que fue auténtico? ¿sabrás cuánto dolió dejarte ir? sabrás cuánto me arrepentí de darle lugar el patético orgullo, y recién tuve la visión clara cuando ya estaba lejos, muy lejos para volver atrás, para decirte ¡ey che! te quise una banda, y te dejé ir por pelotudaza.
Abrí tuiter porque estaba demasiado ahogada en lágrimas como para seguir sumergiéndome en la tristeza que me da pensar en el desenlace de nuestra historia y lo primero que apareció fue el tuit de una mina (que ni siquiera sigo) con tu apellido. Agustina Conc* dice... ni idea quien será, que bronca me da, porque yo no creo en las casualidades. Quizá deba dejar de escribir, para así dejar de encontrarte. Porque siempre que escribo te encuentro, eso me frustra, quiero escribir cosas lindas, quiero escribir sobre el mar, las mariposas, el viento... El viento y todo lo que no se llevó. Pero siempre me termino encontrando con vos, pero cuando escribo, cuando me abro todo me remonta a vos ¿o será al revés? porque siempre empiezo a escribir cuando tengo muchas cosas atragantadas que no puedo decirte. Escribo para sacarme todo ese peso de encima. Escribir es vomitar en ésta hoja todo lo que no puedo decirte a vos, porque estas lejos, porque hace tres años y dos meses (hará esta semana) tomaste la determinación de hacer como si yo morí para vos, de ignorarme por completo, de no saludarme jamás.
El día estaba nublado y pensé que todo el día iba a estar lloriqueando y escribiendo incoherencias pero de repente salió el sol y quizá eso me haga olvidarme un poco de vos, enterrarte en ese fondo de memoria en el que vivís, mal que seguramente si vos lo supieras te pesase. Me quiero olvidar de vos ¿cómo hago? Ya pasaron tres años, 3, 3, 3 ¿no será suficiente castigo del destino? Digo... no sé.
Textos lejanos de lo que no fue

No hay comentarios:

Publicar un comentario